Otra canción más: "En la plaza de mi pueblo", que refleja el que quizá fuera el mayor problema de la II República, la enorme masa de jornaleros sin tierra que pululaban por los campos de Andalucía, Extremadura y La Mancha, que vivían en la absoluta miseria y sin esperanza de mejora. Sólo vieron esa esperanza en la revolución anarquista, que significaba un nuevo mundo totalmente diferente y que pensaban más libre, igualitario y justo.
En la plaza de mi pueblo dijo el jornalero al amo, nuestros hijos nacerán con el puño levantao.
No hay comentarios:
Publicar un comentario